Organizar una mudanza sin estrés es posible

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Cambiar de casa suele ser un momento emocionante, pero puede ser una fuente de estrés e incluso de tensiones en el núcleo familiar. Desde el momento en el que se toma la decisión de mudarse, queda por delante un arduo trabajo y la interrupción de las rutinas habituales de vida. Sin embargo, con organización y planificación, es posible hacer una mudanza sin estrés y que, además, nos sirva para desprendernos de cosas que ya no son necesarias.

¿Cómo elegir la ayuda necesaria para organizar una mudanza sin estrés?

Probablemente necesitaremos ayuda para trasladar los enseres más grandes y pesados, como los muebles. Una vez que hayamos decidido qué objetos queremos que trasladen por nosotros y cuándo, es el momento de buscar una empresa de mudanzas.

Por un lado, es importante realizar este paso tan pronto como sea posible, ya que la mayoría de las personas organizan sus mudanzas en fin de semana y es posible que la empresa que queremos no tenga disponibilidad en la fecha elegida.

Por otro lado, muchas empresas ofrecen servicios de embalaje y desembalaje o de montaje de muebles. A la hora de contratar el traslado, deberemos tener en cuenta, además del precio y la disponibilidad, la experiencia de los profesionales, las opiniones de otros clientes y estos posibles servicios extra. Igualmente, deberemos asegurarnos de que vendrá personal suficiente, se utilizará un vehículo adecuado y se protegerán todos los enseres de cualquier daño.

7 consejos para organizar una mudanza sin estrés

Aunque cierto desorden es inevitable, cuanto mejor organicemos nuestra mudanza, menos problemas encontraremos y menos estrés sufriremos.

1. Realiza listas: 

Organizar nuestra mente tiene que ser el primer paso. Tomar nota de todas las tareas y trámites pendientes nos ayudará a liberar espacio en nuestra mente y evitará que olvidemos, por ejemplo, cambiar suministros o hacer copias de llaves.

2. Consulta las normas de la nueva comunidad:

Es recomendable consultar con antelación las limitaciones que puedan existir en la comunidad a la que nos trasladamos. Algunas comunidades de vecinos establecen condiciones para organizar una mudanza o para utilizar el ascensor. Del mismo modo, debemos comprobar si es necesaria alguna autorización para el vehículo o dónde puede estacionarse.

3. Aprovecha para tirar y donar lo que no necesites:

En los hogares se acumulan muchos objetos que ya no necesitamos. Una mudanza es el momento perfecto para deshacernos de ellos donando los que se encuentran en buen estado y tirando los que no. Para ello, deberemos informarnos sobre cómo y dónde entregar cada objeto, ya sea para donar o para tirar.

4. Prepara lo imprescindible: 

Durante algunos días no podremos disponer de todas nuestras cosas, así que es importante apartar aquellos objetos que necesitamos cada día. Los artículos que probablemente necesitaremos serán algo de ropa, artículos de aseo, medicinas, ropa de cama, artículos de limpieza y de cocina.

5. Reserva un tiempo para la limpieza: 

El mejor momento para limpiar una casa es cuando está vacía. Por este motivo, debemos asegurarnos de que la casa a la que nos trasladamos está limpia antes de llevar nuestras cosas. Del mismo modo, es aconsejable reservar un tiempo para limpiar el hogar que abandonamos una vez se haya vaciado.

6. Comienza a embalar con tiempo: 

Algunas tareas pueden consumir más tiempo del que creemos, por lo que es buena idea empezar a embalar pronto aquellos artículos que no utilizamos a diario. De esta forma, podremos hacer el trabajo tranquilamente y sin presión.

7. Organiza las cajas y distribuye el peso: 

Para evitar accidentes, es importante tener en cuenta el peso de los objetos que vamos a introducir en cada una. Los objetos más pesados deben distribuirse en cajas pequeñas para evitar que se rompan o que puedan producir una lesión al levantarlas. Aquellos que son más ligeros pueden organizarse en cajas más grandes para poder trasladarlos de forma más rápida. Además, podemos anotar la habitación de la casa donde queremos que el personal de la empresa de mudanza deje cada caja.

Siguiendo estos pasos, podremos organizar una mudanza reduciendo al mínimo el estrés y los imprevistos en el proceso. Tras organizar nuestro traslado con éxito, ya solo tendremos que preocuparnos de decorar el nuevo hogar.

Recuerda:

  • Organizar las tareas y comenzarlas con tiempo es la clave para una mudanza sin estrés.
  • Debemos tener en cuenta los tamaños y pesos de las cajas para evitar accidentes y lesiones.
  • Hay que aceptar que durante unos días nuestras rutinas estarán alteradas.