Hurones: ¿son buenas mascotas?

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Aunque hasta hace relativamente poco tiempo eran animales salvajes, cada vez son más los hurones domésticos. Estas pequeñas mascotas forman parte de la familia de los mustélidos, lo que los convierte en parientes de las nutrias, las comadrejas o los tejones.

Sin embargo, la relación entre humanos y hurones no es tan reciente. Los hurones han ayudado en labores de caza y de control de plagas desde hace mucho tiempo y, de hecho, todavía lo hacen. Sin embargo, cada vez es más común que formen parte del hogar. Pero, ¿son buenas mascotas?

7 beneficios de tener a un hurón por mascota

Está comprobado que tener a un perro o un gato en casa revierte en beneficios tanto para nuestra salud mental como para nuestro bienestar físico. En el caso de los hurones, como todavía son pocos los dueños que se atreven con esta mascota, todavía no hay estudios científicos que analicen el impacto de este mustélido en el hogar.

Sin embargo, las experiencias de los dueños y la opinión de los veterinarios arrojan estos 7 beneficios de tener a un hurón por mascota:

  1. Te van a entretener: los hurones son curiosos y activos por naturaleza, y la experiencia de jugar con uno no difiere demasiado de la de jugar con un perro o un gato.
  2. Son inteligentes: estos pequeños animales son muy hábiles para resolver problemas, algo que suele sorprender a los dueños.
  3. Son sigilosos: los hurones no suelen hacer ruido a menos que estén asustados o sientan algún tipo de dolor. Además, duermen gran parte del día.
  4. Su tamaño es apto para todos los hogares: por su tamaño pequeño, los hurones tienen cabida en prácticamente cualquier tipo de hogar. No obstante, si se opta por obtener una jaula, esta sí puede (y debe) ocupar bastante espacio.
  5. La alimentación es sencilla: en la actualidad, existe una amplia variedad de piensos para hurones. Pero además, el abanico de alimentos frescos que puedes ofrecer a un hurón facilita mucho la alimentación del animal.
  6. Son fáciles de ejercitar: mientras que tener un perro exige sacarlo a pasear todos los días, no ocurre lo mismo con los hurones. Estos animales pueden hacer su ejercicio diario recorriendo la casa. Además, ahora existen arneses para hurones, por lo que es posible sacarlos a pasear al exterior si así lo deseas.
  7. Su personalidad es única: algunos hurones son más independientes, y otros, más cariñosos. Cada hurón es único, y llegar a conocerlo puede ser una verdadera aventura.

Por último, cabe resaltar que algunos expertos recomiendan tener más de un hurón. La interacción entre ellos mejora la socialización del animal y aumenta el factor diversión para su día a día.

Posibles riesgos

Aunque son muchos más los beneficios de tener a un hurón, existen 2 riesgos que debemos conocer y tener en cuenta si estamos pensando en tener esta mascota:

  1. Son muy sensibles a los ruidos: los hurones pueden asustarse mucho al escuchar ciertos ruidos, como juguetes chirriantes o el llanto de un bebé. Cuando se asustan, algunos hurones pueden volverse agresivos.
  2. No se recomiendan en hogares con niños menores de 5 años: debido al motivo anterior, los hurones no están recomendados para convivir con niños muy pequeños, ya que podrían atacarlos.

Se aconseja que las familias que están esperando un bebé y tengan un hurón que acomoden su hogar de modo que existan espacios separados para el bebé y el hurón.

Otra cosa que se puede hacer es comprobar si el hurón es susceptible a ciertos ruidos. Por ejemplo, haciendo sonar algún juguete chirriante para ver cómo reacciona. Si el hurón se abalanza sobre el juguete, es muy probable que la convivencia entre el hurón y el bebé sea muy complicada. Así a todo, es importante recordar que, como siempre, todo se reduce a la responsabilidad de los padres y dueños.

Recuerda

Aunque la domesticación de los hurones es reciente, los humanos ya empleaban a estos animales para labores de caza y control de plagas.
Mantener un hurón es, por lo general, muy sencillo.
Se recomienda no tener un hurón en casa si hay niños menores de 5 años en el hogar.