Depresión durante el embarazo y post parto. ¿Qué es, cómo identificarla?

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Aunque en teoría es uno de los momentos más felices y esperanzadores para una mujer, sentir depresión o tristeza durante nuestro embarazo es más común de lo que parece. Para empezar, debemos lidiar con muchos cambios tantos mentales como corporales, miedos e importantes decisiones que tomar.

¿Qué es la depresión?

La depresión es una condición médica que nos causa fuertes sentimientos de tristeza y falta de interés, incluso por cosas con las que normalmente solemos disfrutar, interfiriendo en nuestra vida diaria y afectando a nuestra manera de actuar, pensar y sentir.

Esta enfermedad puede aparecer en cualquier circunstancia y momento de nuestra vida, incluido el embarazo, y lo primero que debemos tener en cuenta es que no somos peores madres o personas por tener estos sentimientos.

Además, nuestro cuerpo sufre una cantidad de cambios hormonales, durante y después de la gestación, que pueden alterar nuestro estado anímico. Por ejemplo, durante el embarazo producimos altos niveles de estrógeno y progesterona que vuelven a la normalidad tras las primeras 24 horas después del parto. Este cambio repentino en nuestros niveles hormonales es el principal causante de la depresión post parto, también conocida como baby blues, problemas para dormir, falta de concentración y aumento de peso.

Principales causas de depresión durante o después del embarazo:

Hay dos tipos de depresión: la tristeza post parto, que suele afectar a la mayoría de las mujeres y normalmente dura entre unos días y hasta dos semanas después del parto, y la depresión perinatal, que suele durar hasta un año después del parto y los síntomas son mucho mas severos. Las principales causas de estos trastornos son:

  • Antecedentes personales y/o familiares con depresión u otras enfermedades mentales.
  • Altos niveles de ansiedad y estrés.
  • Falta de apoyo por parte de familiares, amigos y pareja.
  • Sentimientos negativos hacia el embarazo (sobre todo en aquellos no deseados).
  • Problemas con la pareja, incluyendo problemas monetarios, de índole sexual etc.
  • Uso de sustancias dañinas durante el embarazo.

Cómo identificarla la depresión perinatal:

En este sentido, la depresión durante el embarazo no solo nos perjudica a nosotras como madres, sino también a nuestra pareja y a nuestro bebé. Asimismo, aumenta el riesgo de un nacimiento prematuro,  de que nuestro bebé nazca con problemas de peso, con problemas de conducta o irritabilidad, entre otros.

Los síntomas más comunes de la depresión perinatal son:

  • Trastornos de sueño ya sea por dormir demasiado o por no poder dormir.
  • Tristeza constante.
  • Falta de interés por el cuidado personal.
  • Problemas para recordar cosas y falta de concentración.
  • Falta de motivación incluso para realizar tareas diarias.
  • Alejamiento de familiares y amigos.
  • Cambios constantes y severos en el estado de ánimo.
  • Sentimiento de insuficiencia o fracaso.

Es primordial para nuestra salud y la de nuestro bebé que si sentimos alguno de estos síntomas acudamos a nuestro médico para ponerle solución cuanto antes.

Recuerda:

  • Los síntomas de la tristeza post parto suelen durar hasta dos semanas después del parto.
  • La depresión perinatal o post natal suele durar hasta un año después del parto y sus síntomas son mucho mas severos.