Técnicas y alimentos para prevenir la obesidad

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El número de personas que padece obesidad ha incrementado alarmantemente a nivel global durante los últimos años, pero ¿cuándo hablamos de obesidad? ¿Podemos prevenir la obesidad?

Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) se considera que una persona tiene obesidad cuando su IMC (Índice de Masa Corporal) supera la cifra 30 mientras que se considera sobrepeso si el índice supera 25. Las personas que tienen sobrepeso tienen más riesgo de sufrir obesidad en el futuro y, consecuentemente, aumenta el riesgo de padecer muchas otras enfermedades.

Causas del sobrepeso:

Mientras que obesidad es una enfermedad por la que una persona aumenta excesivamente su grasa corporal y consecuentemente su peso, el sobrepeso puede ocurrir debido a exceso de músculo, hueso o agua. Algunas causas físicas y psicológicas del sobre peso son:

  • Una vida sedentaria en la que no se realice actividad física.
  • Enfermedades de carácter genético.
  • Algunas medicaciones que pueden derivar en un riesgo mayor de sufrir sobrepeso.
  • La mala alimentación y el abuso de grasas saturadas y azúcares refinados.
  • Afecciones psicológicas como el estrés y la ansiedad, son también causantes en algunos casos de esta patología.
  • Ciertos problemas hormonales, como el tiroides.

Técnicas y alimentos para prevenir la obesidad:

Lo más importante para prevenir la obesidad es seguir una dieta equilibrada que nos proporcione los nutrientes, vitaminas y minerales que necesitamos. Todo ello acompañado de la practica moderada habitual de deporte.

Una alimentación sana, pero variada nos puede ayudar a no consumir alimentos procesados. Para ello, algunas recomendaciones son:

  1. Realizar cinco comidas diarias evitando picar entre horas y haciendo que nuestra cena y merienda sean ligeras.
  2. Se recomienda consumir lácteos desnatados con una frecuencia máxima diaria de tres veces.
  3. Es necesario evitar carnes que contengan muchas grasas y evitar los embutidos.
  4. Consumir pescado azul que contiene omega -3 ayudan a reducir la cantidad de grasa en nuestro cuerpo.
  5. Las frutas y verduras son un gran aliado en nuestra dieta y lo ideal sería consumir cinco piezas al día.
  6. Es importante consumir cereales y legumbres que nos sacien y nos aporte hidratos de carbono complejos.
  7. No debemos abusar de la sal.
  8. Controlar la cantidad que ingerimos de algunos tipos de alimentos que contienen muchas calorías como dulces, bollería etc.
  9. El agua es un gran aliado que mantiene nuestro cuerpo hidratado por lo que deberíamos beber entre 1,5 y 2 litros diarios evitando las bebidas azucaradas.
  10. Se debe evitar el consumo de azúcares procesados y de grasas saturadas.

Recuerda:

  • La obesidad es una enfermedad que afecta a muchas personas mundialmente y se relaciona con el aumento IMC.
  • Puede tener graves consecuencias para nuestra salud aumentando el riesgo de padecer ciertas enfermedades.
  • Para prevenirlo, se recomienda una dieta variada y equilibrada rica en frutas, verduras, legumbres, cereales y evitando el consumo de grasas saturadas.