Entender a nuestros perros es fundamental para una buena convivencia. Aunque los humanos estamos más acostumbrados a la comunicación verbal, los perros se expresan principalmente a través del lenguaje corporal. Dentro de este, las señales de calma en perros juegan un papel crucial.
Aprender a identificar e interpretar estas señales no solo puede mejorar nuestra relación con ellos, sino que también puede prevenir posibles problemas de comportamiento o reacciones agresivas. Los perros utilizan alrededor de 30 señales de calma distintas, y aunque no todos ellos las emplean con la misma frecuencia o notoriedad, su dominio es clave para entender mejor a nuestra mascota.
¿Qué son las señales de calma en perros y por qué son importantes?
Las señales de calma en perros son gestos naturales con los que los perros buscan comunicarse, expresar incomodidad o simplemente regular situaciones tensas. Pueden aparecer en contextos muy variados: desde un simple encuentro con otro perro hasta una situación estresante en casa. De esta manera, estas señales pueden agruparse en 3 grandes categorías:
- Interacción o comunicación: en general, los perros emplean gestos corporales para relacionarse y evitar conflictos de forma pacífica.
- Liberación de estrés: también se valen de ciertas conductas para calmarse en situaciones que les generan tensión.
- Advertencia: emiten señales claras cuando se sienten incómodos o amenazados para evitar enfrentamientos.
Estas señales comienzan a aprenderse durante la etapa de socialización, especialmente en los primeros 3 meses de vida. Por eso, los perros que han sido destetados prematuramente o no han tenido contacto suficiente con otros animales pueden presentar más dificultades para usarlas correctamente.
Las 11 señales de calma más comunes y su interpretación
Es esencial tener en cuenta que los perros asumen que los humanos también comprenden su lenguaje, por lo que nuestra capacidad de respuesta a sus señales de calma influye directamente en su comportamiento. Sin embargo, muchas de ellas pueden pasarnos desapercibidas si no estamos atentos. Estas son las señales de calma más frecuentes en perros:
- Bostezar o lamerse el hocico: son gestos que pueden mostrar nerviosismo o la necesidad de calmar una situación.
- Girar la cabeza o evitar la mirada: buscan disminuir la tensión. Aparecen cuando el perro se siente observado, intimidado o incómodo.
- Caminar despacio: muestra inseguridad o una intención de evitar el conflicto. También lo utilizan los perros para que su presencia no resulte amenazante.
- Olisquear el suelo: en un contexto social, puede indicar que el perro desea evitar una interacción directa. No debe confundirse con el olfateo normal.
- Posición de juego (con las patas delanteras flexionadas): aunque puede parecer una invitación al juego, también puede emplearse como una forma de relajar el ambiente.
- Ojo de ballena (cuando se ve la parte blanca del ojo): señala un alto nivel de estrés o tensión. Es una alerta de que el perro se siente amenazado.
- Acercarse en curva: indica una intención no invasiva. Es un comportamiento propio de perros bien socializados.
- Tumbarse con el abdomen en el suelo: demuestra sumisión y deseo de evitar problemas.
- “Mirada de cachorro”: se utiliza para provocar una respuesta amable. Es exclusiva de los perros y resultado de su convivencia con humanos.
- Sonrisa (jadeo en momentos de tensión): no indica alegría, sino estrés emocional.
- Lamer, rascarse o sacudirse: son distintas formas de liberar tensión acumulada tras una situación incómoda.
En definitiva, conocer y aplicar el lenguaje de las señales de calma en perros nos permite conectar de forma más profunda con nuestro perro y construir una relación basada en la comprensión mutua.