Cuidados básicos tras una operación de cataratas

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La operación de cataratas es una intervención sencilla y rápida, cuyo postoperatorio es, a menudo, muy llevadero. Los especialistas aseguran que se puede hacer vida prácticamente normal desde el día después de la operación, siempre hasta donde la calidad visual lo permita. No obstante, existen una serie de cuidados básicos tras una operación de cataratas a seguir como evitar tocarse los ojos que evitarán cualquier problema derivado de la operación.

Cuidados básicos tras una operación de cataratas

La operación de cataratas es una de las que se realizan más frecuentemente en el área de Oftalmología. Tiene un gran porcentaje de éxitos y lo habitual es que la intervención salga bien. 

Sin embargo, como toda operación, también tiene sus riesgos. Uno de los principales defectos oculares asociados a la operación de cataratas es el astigmatismo. Os contamos en qué consiste y las diferencias entre miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia.

Por tanto, es importante no restarle importancia y seguir los cuidados aconsejados por el médico especialista en Oftalmología. Las recomendaciones son las siguientes:

  • Sobre todo al principio, evitar los movimientos brucos o tocarse los ojos, para reducir la posibilidad de infecciones.
  • Utilizar colirios antibióticos y antinflamatorios.
  • Dormir con un protector rígido para evitar golpes accidentales durante el sueño.
  • Guardar reposo y seguir las medidas higiénicas básicas.
  • Acudir a revisión el día siguiente a la intervención y de manera habitual según la periodicidad pautada por el oftalmólogo.

Síntomas que alertan de un problema tras la intervención de cataratas

Tras la intervención es importante, por tanto, seguir las claves para cuidar la salud ocular generales y las específicas que relatábamos previamente. Además, estar pendientes de nuestros ojos nos ayudará a darnos cuenta de la posible aparición de síntomas de alerta que nos indiquen que algo no ha salido bien:

  • Dolor intenso.
  • Ojo muy rojo y doloroso.
  • Disminución brusca de la visión que previamente tenía.
  • Secreciones abundantes y amarillentas.
  • Visión doble.
  • Subida de tensión, acompañada de náuseas y vómitos.

La recomendación, ante cualquiera de dichos síntomas, no es otra que ponerse en contacto con el médico oftalmólogo. Este podrá aconsejarnos si es necesario en nuestro caso poner en marcha algún tratamiento.

¿Cuándo debo operarme de cataratas?

La operación de cataratas es una intervención quirúrgica que, a menudo, tiende a aplazarse en el tiempo por su carácter de menor urgencia frente a otras patologías. Sin embargo, los oftalmólogos aconsejan no posponerla en exceso, por dos motivos:

  • Para evitar la mala calidad visual de los pacientes. Se ha demostrado que los pacientes que no se operan de cataratas ven elevado su riesgo de accidentes de tráfico, caídas o fracturas. Incluso, pueden asistir a problemas neuronales o psicológicos como el Alzhéimer, al no contar con una calidad visual adecuada.
  • Para evitar la complicación de la cirugía. Hay un momento idóneo para operar las cataratas. De dejarlas formarse mucho, se hacen más duras y las cirugías se tornan más complejas, haciendo que el ojo del paciente pueda sufrir más y el postoperatorio sea menos llevadero.

Recuerda:

  • La operación de cataratas es una intervención quirúrgica sencilla y cuyo postoperatorio suele ser muy llevadero.
  • Sin embargo, no conviene restarle importancia. Seguir todos los cuidados pautados por el médico oftalmólogo ayudará a evitar posibles complicaciones de la cirugía.
  • Además, evitar posponer la cirugía ayudará a evitar que la operación se torne más compleja y el ojo pueda sufrir más.