Así fue el camino de Pfizer para descubrir la vacuna contra la COVID-19

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Sergio Rodríguez, presidente y director general de Pfizer en España, ha participado en “La Mirada ASISA”. En una conversación con la Dra. María Tormo, directora de Planificación y Desarrollo de ASISA, ha analizado la situación actual de la pandemia generada por la COVID-19 y ha reiterado su objetivo de continuar trabajando y colaborando con todos los agentes sanitarios para mejorar la sanidad y la vida de los pacientes.

La tecnología, compartir conocimiento, la colaboración sanitaria, la investigación y desarrollo de soluciones sanitarias y la relación médico-paciente han sido los ejes compartidos para trazar la mirada común de ASISA y Pfizer sobre la situación que ha causado la pandemia y continuar con el compromiso del cuidado de los pacientes y asegurados y, a la vez, contribuir a la mejora del sistema sanitario.

Aprovechar el conocimiento anterior

Durante la conversación, el presidente y director general de Pfizer España ha explicado el recorrido de su compañía para llegar a descubrir la vacuna contra la COVID-19, que ha permitido empezar a vislumbrar el final de la pandemia. Sergio Rodríguez ha subrayado la importancia de dos elementos clave para llegar a conseguir este objetivo: una financiación adecuada para desarrollar la investigación y la colaboración para compartir conocimiento.

Sergio Rodríguez ha explicado que Pfizer tomó la decisión de volcarse en la investigación para encontrar la vacuna contra la COVID-19 en marzo de 2020, cuando la enfermedad comenzó a extenderse y a dar muestras de su gravedad. Para ello, la farmacéutica partió de la colaboración que mantiene desde 2018 con BioNTech con el objetivo de desarrollar una vacuna contra la gripe y de los avances logrados hasta ese momento en la tecnología de ARN mensajero. Una vez tomada esa decisión de priorizar la vacuna contra la COVID-19, Pfizer destinó recursos, tanto financieros como de conocimiento y personal investigador, a este proyecto y abrió sus bases de datos de conocimiento para colaborar con otras compañías con el objetivo de acelerar sus investigaciones.

El máximo responsable de Pfizer en España ha destacado la importancia de los avances que su compañía, junto a BioNTech, habían logrado en los dos años anteriores para desarrollar una plataforma de ARN mensajero que ha permitido adaptar rápidamente sus investigaciones sobre el virus de la gripe a la búsqueda de la vacuna contra el SARS-CoV-2, el coronavirus que provoca la COVID-19. Esta reorientación de unas investigaciones ya avanzadas explica, en parte, la rapidez para el desarrollo de la vacuna.

En paralelo al desarrollo de la investigación científica, Sergio Rodríguez ha destacado el trabajo que Pfizer ha desarrollado durante esto meses con las autoridades sanitarias para compartir información y desarrollar una estrategia coordinada que permita dar una respuesta rápida a la pandemia.

La imprescindible cooperación sanitaria

Al hilo de la colaboración sanitaria, tanto ASISA como Pfizer coinciden en que es necesaria la cooperación entre todos los agentes del sector, tanto públicos como privados, para resolver los problemas sanitarios y continuar avanzando en la mejora de la sanidad y la atención al paciente.

Dentro de esta colaboración, ¿cuál es el papel que va a jugar la tecnología? Para Sergio Rodríguez, la tecnología trae grandes beneficios para el paciente, para los profesionales médicos y para el sistema sanitario. En este sentido, ha explicado que la tecnología es necesaria para la sostenibilidad de una sanidad de calidad y es preciso aplicarla con inteligencia sin que esto influya en la relación médico-paciente, fundamental hoy en día.

Durante esta mirada común, también se ha analizado la preocupación por aquellos pacientes no COVID-19. ¿Ha afectado la búsqueda de la vacuna a la investigación y desarrollo de las enfermedades denominadas como raras? La respuesta de Pfizer es clara: la compañía no ha dejado de trabajar en la investigación y desarrollo de soluciones para estos pacientes y todos los proyectos que ya estaban en marcha han seguido su curso natural.